Croquetas de… Esos días
Esos días de rocas y viento. De pronunciadas orillas. De agua salada. De fina arena. De castillos y olas.
Esos días que espantan rutinas marcadas. De mañanas pausadas. De siestas que atrapan. De plácidas tardes. De noches saladas.
Esos días de playa y piel tostada. De calor y de frío.
Esos días de cocinas al aire y cenas compartidas. De mejillones, arroz y ensaladas frías. De sandía y de melón.
Esos días de viajes, cuentos y juegos. De paradas sin pausa. De llegadas ansiadas.
Esos días de cielos azules. De soles brillantes. De nubes que narran. De mar y de olas. De silbidos de conchas y caracolas.
Esos días de vida sin lujo. De lujo de vida. De furgoneteo.
Esos días de hamaca. De toldo y sombrilla. De cuerda infinita. De silla plegada.
Esos días de sonrisas salpicadas. De abrazos sin partida. De besos eternos. De cómplices risas. De locuaces miradas.
Esos días de descanso del alma. De fantástica calma.
Esos días de tierra, aire y agua. De alas chillonas. De bosques y lagos. De brazadas con anclas. De redes nocturnas. De pinos y arándanos. De cangrejos de río.
Esos días de libros. De dibujos con lápiz. De letras y colores.
Esos días de hogueras que queman. De lumbres que arañan. De chispas que vuelan. De olores que impregnan. De brasas que humean.
Esos días de cielos encapotados y noches centelleantes, eternas, radiantes.
Esos días…